El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y su brazo del sector privado, BID Invest, finalizaron el año 2021 con aproximadamente US$23.400 millones en nuevos financiamientos, compromisos y movilizaciones para América Latina y el Caribe, al haber apoyado a los países para reponerse de la pandemia y dar paso a un período de crecimiento sostenible e inclusivo.
Los países se han apoyado en este financiamiento para invertir en distintas prioridades, «desde la atención sanitaria de la era del COVID-19 y la digitalización, hasta la acción contra el cambio climático, las cadenas de suministro y la educación». Estos recursos financieros también se orientan a la ayuda para «reducir la desigualdad de género, aumentar los ecosistemas empresariales, y empoderar a las pequeñas y medianas empresas, que representan más de dos tercios de los empleos de la región».
Ante una reconfiguración histórica del comercio internacional, el BID aprobó US$2.300 millones para el fortalecimiento de las cadenas de suministro regionales, lo cual permitirá a los países a aprovechar las oportunidades para atraer inversión extranjera directa e incrementar sus exportaciones de bienes y servicios, dada la crisis en las cadenas globales de suministro.
El BID también aplicó un nuevo proceso más simple para los proyectos que logró acortar los tiempos de aprobación en un 30%, de manera que la organización estuvo en capacidad de responder rápidamente a las necesidades de sus 26 países miembros regionales.
Fuente: Nota de Prensa – BID
